El ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz de Venezuela, Diosdado Cabello, se pronunció este lunes sobre el reciente asalto realizado por militares de EE.UU. a un buque petrolero en costas del país suramericano, en el contexto de la agresión militar de ese país en el Caribe.
"Nosotros lo hemos dicho, lo dijo el comandante [Hugo] Chávez, que había petróleo como para cien años, pero tienen que pagarlo, robado no", dijo el también secretario general del Partido Socialista Unidos de Venezuela (PSUV) durante una rueda de prensa.
En su intervención, Cabello envió un mensaje a EE.UU., que desde agosto mantiene un despliegue militar significativo en el Caribe, que incluye más de una veintena de bombardeos a pequeñas embarcaciones y que más recientemente contempló el asalto a un buque petrolero en las costas venezolanas.
"¿Y ustedes creen que van a venir aquí a hacer algo y después van a venirse a llevar el petróleo de Venezuela? No se van a llevar nada, ni una gota de petróleo, tengan la seguridad. Aquí hay petróleo, pero tienen que pagarlo", dijo.
A la caza de otros recursos
Cabello acusó a EE.UU. de quererse "robar" el crudo venezolano y otros recursos estratégicos. "No es que van a dejar el oro y el gas que tenemos. También van a intentar robarlo, o es lo que ellos creen que van a hacer".
El país suramericano, catalogado como una "gran potencia energética", posee las mayores reservas probadas de crudo del mundo que alcanzan los 303.806 millones de barriles.
Washington ha justificado su escalada de hostilidades bajo la acusación, sin mostrar ninguna evidencia, de que el presidente venezolano, Nicolás Maduro, lidera un supuesto Cártel de los Soles, cuya existencia no ha sido reseñada por los organismos especialistas en la lucha antidrogas en sus informes anuales.
Por su parte, Caracas ha denunciado reiteradas veces que el objetivo real de EE.UU. es lograr un "cambio de régimen" para apoderarse de las inmensas riquezas petroleras y gasísticas de Venezuela.
La agresión de EE.UU. en el Caribe, en síntesis
- Despliegue militar: desde el pasado mes de agosto, EE.UU. mantiene desplegada una fuerza militar significativa frente a las costas de Venezuela, justificándola como parte de la lucha antidrogas. Washington anunció posteriormente la 'operación Lanza del Sur', con el propósito oficial de "eliminar a los narcoterroristas" del hemisferio occidental y "proteger" a EE.UU. "de las drogas que están matando" a sus ciudadanos.
- Operativos letales: como parte de estas operaciones se han realizado bombardeos contra presuntas embarcaciones de narcotraficantes en el Caribe y el Pacífico, con un saldo de más de 80 personas muertas y sin pruebas de que realmente traficaran con estupefacientes.
- Asalto a buque petrolero: en una escalada de las acciones violentas de EE.UU. en la región, militares estadounidenses asaltaron un buque petrolero en costas venezolanas. Caracas catalogó el hecho como un "acto de piratería internacional", que constituye una acción "criminal e ilegal".
- Acusaciones y recompensa: Washington ha acusado sin presentar evidencias al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, de liderar un cártel del narcotráfico y ha duplicado la recompensa por su captura.
- Postura de Caracas: Maduro denuncia que el objetivo real de EE.UU. es un "cambio de régimen" para apoderarse de las inmensas riquezas petroleras y gasísticas de Venezuela.
- Falta de sustento: la ONU y la propia DEA señalan que Venezuela no es una ruta principal para el narcotráfico hacia suelo estadounidense, ya que más del 80 % de las drogas utilizan la ruta del Pacífico.
- Condena internacional: Rusia, el alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos y los Gobiernos de Colombia, México y Brasil han condenado las acciones estadounidenses. Expertos califican los ataques a embarcaciones como "ejecuciones sumarias" que violan el derecho internacional.


